El mudi es un perro pastor originario de Hungría que surgió entre los siglos XVIII y XIX. A diferencia de otras razas que han sido especialmente creadas por el humano, el mudi parece que evolucionó de forma natural a partir de cruces entre perros de tipo spitz y otras razas húngaras como el puli o el pumi.

La raza estuvo al borde de la extinción durante la Segunda Guerra Mundial, pero gracias al gran trabajo realizado por los conservacionistas de esta raza, se ha conseguido que el mudi haya sobrevivido hasta la actualidad.

La Federación Cinológica Internacional (FCI) reconoció la raza en 1966 y, a partir de entonces, también lo hicieron el American Kennel Club (2004) y el United Kennel Club (2006). En la actualidad, el número de ejemplares de esta raza es reducido. Se estima que tan solo hay unos pocos miles de mudis en todo el mundo, siendo Hungría el país con mayor población, seguido de otros como Finlandia, EEUU y Canadá.

Dentro del estándar racial del mudi, destacan las siguientes características anatómicas:

• Es un perro de tamaño medio. Las hembras pesan entre 8 y 11 kg y tienen una altura de entre 38-44 cm, mientras que los machos pesan entre 11 y 13 kg y miden entre 41 y 47 cm.
• La cabeza tiene forma de cuña y un stop (depresión naso-frontal) suavemente marcado.
• Su expresión facial es la propia de un animal alerta, enérgico e inteligente. Los ojos suelen ser de color oscuro y tienen una posición oblicua, lo que le confiere un aspecto algo desafiante a su mirada.
• Las orejas son triangulares y tienen una implantación alta. Los mudis mantienen las orejas siempre erectas y responden a los estímulos moviéndolas de manera muy vivaz.
• La cola tiene una inserción a media altura. En reposo cuelga hasta los corvejones, mientras que cuando el animal está en alerta se mantiene en forma de hoz por enzima de la línea del dorso.
• En cuanto al pelaje, la cabeza y la cara anterior de las extremidades están cubiertas por un pelo corto y liso, mientras que en el resto del cuerpo el pelaje es largo y presenta marcadas ondulaciones o ligeros rizos.

Colores del mudi

El pelaje del mudi puede tener diferentes colores de base:

• Bayo
• Negro
• Azul mirlo
• Marrón
• Blanco

Sobre esta base, pueden aparecer manchas blancas, tanto en el pecho como en los dedos.

El mudi es un perro con una gran capacidad de aprendizaje, un temperamento vivo, valiente y despierto, que además destaca por adaptarse con facilidad a distintos entornos y labores. Todas estas características convierten al mudi en una raza tremendamente versátil. Como ya hemos comentado, tradicionalmente se ha empleado como perro pastor tanto de ovejas como de animales de gran porte. Sin embargo, sus innumerables capacidades y habilidades han permitido que el mudi también se utilice para otras actividades como la guarda y defensa o la detección de drogas.

Además, se trata de un gran animal de compañía que destaca por su temperamento estable y alegre. El mudi es un animal muy sociable, que disfruta de la vida en familia y que suele tener una buena relación tanto con los niños como con otros animales. En general, se adapta con facilidad a la vida dentro del hogar, aunque es importante que tenga acceso a un patio o jardín en el que pueda jugar y entretenerse.

Un punto a tener en cuenta es que suele ser un perro bastante vocal. Debido a sus orígenes como pastor, suele ser un perro ladrador, lo que puede resultar algo molesto para algunos cuidadores. Además, en ocasiones su instinto territorial puede generar conflictos con otros perros. No obstante, una correcta educación y socialización desde edades tempranas evitará estos problemas.

El mudi es una raza fácil de cuidar que no tiene unas exigencias demasiado específicas. No obstante, como cualquier otro perro, necesita unos cuidados básicos para mantenerse física y mentalmente sano:

• Alimentación: independientemente de si se alimentan con pienso o con una ración casera, los mudis deben recibir una dieta de alta calidad, saludable y adaptada a su edad y a su nivel de actividad. En este otro post hablamos en profundidad sobre Qué comen los perros.
• Ejercicio: aunque son animales que se adaptan con facilidad a la vida dentro de los hogares, necesitan liberar su energía diariamente para mantenerse sanos y equilibrados. Por ello, es conveniente que dispongan de un patio o jardín en el que puedan distraerse y que realicen al menos un paseo largo al día para satisfacer sus necesidades físicas, mentales y sociales.
• Aseo: en cuanto a la higiene y cepillado, no son animales especialmente demandantes. Un cepillado a la semana y un baño cuando sea necesario (una vez al mes, aproximadamente) será suficiente para mantener su pelaje fuerte y brillante. Además, es importante mantener una buena higiene de los oídos, recortar las uñas con regularidad y vigilar la posible presencia de parásitos externos entre el pelaje.

Como cualquier raza, el mudi debe recibir una correcta educación y sociabilización desde edades tempranas para así evitar problemas de conducta con las personas y otros animales en su vida adulta. El mudi es una raza extremadamente inteligente. Aunque en ocasiones pueda ser algo testarudo, suele ser un perro que se entrena con facilidad y que, además, disfruta aprendiendo y trabajando. Eso sí, para obtener los resultados esperados y no perturbar su bienestar, es fundamental emplear técnicas de adiestramiento respetuosas con el animal, como las que utilizan el refuerzo positivo y rechazan el castigo o cualquier tipo de violencia.

En general, los mudis son perros muy activos, tanto física como mentalmente, lo que los convierte en excelentes candidatos para el ejercicio de algunas disciplinas como el Agility o el Flyball. Este tipo de entrenamientos no solo refuerzan y consolidan los lazos entre los cuidadores y sus animales, sino que además ayudan a consumir parte de su energía.

Para ayudarte con la educación y el adiestramiento de tu mudi, te recomendamos consultar estos artículos:

• ¿Cómo educar a un cachorro?
• ¿Cómo socializar a un cachorro?
• ¿Cómo adiestrar a un perro?

En general, el mudi se considera una raza de perro saludable. El hecho de que surgiese de forma natural, sin la intervención del ser humano, hace que esté menos predispuesto a ciertas patologías hereditarias que otras razas.

No obstante, existen algunas enfermedades que suelen presentarse con cierta frecuencia en estos perros y que, por tanto, conviene monitorizar con regularidad. Estas patologías son:

• Displasia de cadera
• Displasia de codo
• Luxación de rótula
• Cataratas
• Epilepsia

Por otro lado, es fundamental llevar a cabo un adecuado calendario de vacunas y de desparasitación a fin de evitar otros problemas, como infestaciones graves de parásitos.