Terrier australiano
El terrier australiano o Australian terrier, es un perro pequeño pero robusto, muy parecido al Yorkshire terrier y al Australian silky terrier o terreir sedoso australiano. Este can proviene de la isla autraliana de Tasmania, tiene un carácter decidido y es mucho más tranquilo y menos ladrador que otros perros terrier, aunque si se fomenta esta mala conducta, puede llegar a ser un perro que ladre excesivamente.
Debido a su tamaño y a la poca actividad física que necesitan, estos perros son excelentes mascotas para niños un poco mayores ya que pueden vivir en una casa o piso pequeños perfectamente y son muy familiares con los suyos. Si quieres adoptar un terrier australiano y no sabes nada de esta raza, no te pierdas esta ficha en la que te explicaremos todo lo que necesitas saber.
Origen del terrier australiano
Este terrier nació en la isla australiana de Tasmania, a partir de cruces entre diferentes perros terrier que habían sido llevados desde Europa. Entre las razas que se piensa dieron origen al terrier australiano, se encuentran: Dandie Dinmont terrier, Yorkshire terrier, Skye terrier y Manchester terrier. La mezcla de tantas razas dio lugar a una buena genética que podría explicar la poca frecuencia de enfermedades hereditarias en esta raza. Otra explicación plausible es la intensa selección natural a la que se vio sometido el terrier australiano desde sus orígenes, ya que el ambiente rural australiano es duro y hostil.
Sea como fuere, el resultado de los cruces dio lugar a un perro pequeño pero rudo y resistente, capaz de cazar roedores y serpientes, y de dar la alarma ante la presencia de extraños. A pesar de eso, el carácter que quedó en este terrier es más estable y tranquilo que en otros perros del grupo. Hoy en día el terrier australiano es principalmente un perro de compañía, muy apreciado en Australia pero también conocido en diferentes partes del mundo.
Características físicas del terrier australiano
Estos perros tienen un cuerpo pequeño pero robusto para su talla. Más largo que alto, el terrier australiano tiene una conformación rectangular. La altura a la cruz ideal para los machos es de 25 centímetros, mientras que las hembras son ligeramente más pequeñas. El peso ideal para los machos es de 6,5 kilogramos, siendo las hembras proporcionalmente más ligeras. Tal como indica el estándar FCI de la raza, el terrier australiano es “un perro robusto, de extremidades cortas y alargado en proporción a la altura”.
La cabeza de este perro es moderadamente ancha y con la bóveda craneal aplanada. La nariz, negra, es mediana y se extiende hasta la caña nasal. El hocico es fuerte para un perro tan pequeño y tiene la misma longitud que el cráneo. Los ojos tienen expresión astuta, y son pequeños, ovalados y de color café oscuro. Las orejas son pequeñas, erectas y puntiagudas. La cola del terrier australiano es de inserción alta y suele ir levantada, pero no sobre la espalda. Desgraciadamente, el estándar FCI de la raza indica que la cola debe ir amputada, promoviendo prácticas antiguas que no tienen en cuenta el bienestar de los animales.
Estos terrier tienen un pelaje de doble capa. La capa externa de pelo es recta, áspera y moderadamente larga. La capa interna es corta y suave. Los colores aceptados en esta raza son: azul y fuego, azul-acero y fuego, azul-gris y fuego, arena o rojo.
Carácter del terrier australiano
Este perro es, en esencia, un terrier de trabajo y por eso tiene un temperamento valiente y decidido. Sin embargo, es más estable y tranquilo que la mayoría de los demás terrier y, por tanto, también es un excelente perro de compañía.
El terrier australiano necesita mucha compañía de su familia, pero tiende a ser reservado con los extraños. También puede ser agresivo con perros del mismo sexo y con animales pequeños, pero no tiene tanta tendencia a la agresión como otras razas de terrier. De cualquier manera, es importante socializar al perro desde que es un cachorro con la gente, con perros y con otros animales, desde temprana edad.
Aunque la raza fue desarrollada principalmente para cazar animales pequeños, el terrier australiano es muy versátil y puede ser una excelente mascota, pero no concretamente para niños muy pequeños, ya que éstos pueden maltratar al perro y el perro puede defenderse mordiendo. Sin embargo, es una excelente mascota para niños grandes que saben respetar al perro.
Cuidados del terrier australiano
El cuidado del pelo es más sencillo que en otras razas de perros, y no demanda tanto tiempo. En general basta con el cepillado dos veces por semana y la extracción manual de pelo muerto (stripping) dos o tres veces por año. Además, cuando el pelaje está cuidado regularmente, estos perros no pierden mucho pelo. No es necesario ni saludable bañar a estos perros con mucha frecuencia y sólo hay que hacerlo cuando realmente están sucios.
El terrier australiano no requiere mucho ejercicio y basta con una caminata moderada cada día para mantenerlo en forma. Por otra parte, sí demanda mucha compañía, así que un tiempo de juego diario, además del tiempo dedicado al adiestramiento canino y otras actividades rutinarias, puede ayudar a ejercitar al perro al mismo tiempo que fortalece el vínculo con su propietario. Estos perros se adaptan bien la vida en pisos, pero pueden ser ladradores. De cualquier manera, son perros que necesitan mucha compañía y deben vivir dentro de la casa junto al resto de la familia.
Educación del terrier australiano
Por otra parte, es uno de los terrier más fáciles de adiestrar, ya que no es tan hiperactivo como otros del grupo. Sin embargo, es importante entrenarlo en base a métodos positivos, ya que es un perro sensible y responde mal al adiestramiento tradicional, al igual que todos los animales.
Entre los problemas comunes de comportamiento en esta raza, se encuentran los ladridos excesivos, la tendencia a cavar en el jardín y, ocasionalmente, la agresividad hacia perros y otras mascotas. Estos problemas pueden prevenirse dándole a los perros la oportunidad de ejercitarse, la suficiente compañía, una correcta socialización y el adiestramiento adecuado.
Salud del terrier australiano
El terrier australiano está entre los perros más saludables y no presenta tendencia a enfermedades hereditarias importantes. Sin embargo, ocasionalmente se han detectado dolencias como:
- enfermedad de Legg-Calve-Perthes
- luxación patelar
- diabetes
- alergia a las pulgas
- criptorquidismo