Schnauzer gigante
Por su parentesco con el schnauzer y su pasado como perro pastor, los schnauzer gigantes son unos perros grandes, robustos y fuertes, que sirven tanto para tareas de vigilancia y protección, como de pastoreo, aunque en este último aspecto cada vez se usan menos. Al ser tan grandes, necesitan una buena dosis de ejercicio diario, por eso no están recomendados para personas que no tienen tiempo de darles largos paseos o de jugar con ellos. Pero no por su tamaño son perros independientes, sino que son una raza de perros muy inteligente, activa e leal, que con un correcto adiestramiento y ejercicio, son capaces de desarrollar muchas habilidades.
En este artículo te mostramos toda la información necesaria si estás pensando en adoptar un schnauzer gigante.
Origen del schnauzer gigante
Esta raza se originó en Alemania, a partir de su primo el schnauzer. Los ganaderos alemanes estaban tan impresionados con las cualidades del schnauzer que decidieron crear una nueva raza que tuviera las mismas cualidades, pero que fuese más grande. El tamaño era una cualidad necesaria para manejar ganado vacuno. No existe un registro de los cruces realizados para obtener al schnauzer gigante, pero se piensa que en esta raza existe sangre de gran danés y bouvier des Flandres entre otras.
Con el paso del tiempo, el schnauzer gigante demostró sus cualidades como perro de guardia y dejó de ser un perro boyero. Con la Segunda Guerra Mundial, la raza perdió popularidad, pero al finalizar la guerra su población volvió a crecer.
Hoy en día es una raza conocida pero no muy extendida. Su popularidad es moderada y se utiliza principalmente como mascota, aunque es una raza muy apreciada por fuerzas de policía donde puede dar rienda suelta a sus mayores cualidades.
Características físicas del schnauzer gigante
De acuerdo con el estándar FCI de la raza, la altura a la cruz, tanto para machos como para hembras, oscila entre 60 y 70 centímetros. Por su parte, el peso ideal, tanto para machos como para hembras, se encuentra entre 35 y 47 kilogramos. La apariencia general de este perro es exactamente igual a la del schnauzer, pero en un tamaño mucho mayor. Se trata de un perro grande, fuerte y robusto, con una altura a la cruz aproximadamente igual al largo del cuerpo. La espalda es corta y fuerte, y desciende levemente desde la cruz hacia la región posterior del perro. El lomo es corto y la grupa levemente redondeada. El pecho es moderadamente ancho y profundo, llegando hasta los codos. Los flancos se recogen en el vientre, aunque no excesivamente.
La cabeza del schnauzer gigante es muy característica y presenta cejas tupidas. Es fuerte y alargada, y tiene la longitud aproximada de la mitad del cuerpo, medido desde la cruz hasta la base de la cola. La frente es plana y el occipucio no está muy marcado. El stop, o depresión naso-frontal, está bien marcado debajo de las cejas. El hocico es recto y con forma de cuña truncada. Está cubierto de pelaje tupido que forma bigotes y barba. Los labios son negros y bien adheridos. La mordida debe ser en tijera. Los ojos de este perro son ovalados, medianos y oscuros. Tienen una expresión vivaz. Las orejas, por su parte, son de inserción alta y en forma de “V”. Antiguamente se cortaban para cumplir con el estándar de la raza, pero afortunadamente hoy en día el estándar exige que sean completas, por lo que no hay necesidad de mutilar a los perros. De todos modos, aún pueden verse schnauzer gigantes con orejas amputadas.
La cola debe tener forma de sable o de hoz. Hoy en día el estándar FCI de la raza exige que la cola sea natural. Sin embargo, antiguamente se exigía la cola amputada, y aún existen muchos perros de esta raza con colas cortadas. Afortunadamente esta práctica está desapareciendo.
El pelaje está compuesto por una lanilla tupida y un pelaje externo duro y bien pegado al cuerpo. El resultado es un pelaje general duro, alambrado y tupido. Este pelo forma una barba sobre el hocico y unas cejas muy tupidas sobre los ojos, características de la raza. Los colores aceptados son negro puro y “sal y pimienta”.
Carácter del schnauzer gigante
Los schnauzer gigantes son perros de temperamento estable, muy inteligentes, leales, valientes y activos. Les encanta jugar y disfrutan a lo grande las actividades físicas al aire libre. Suelen ser territoriales y reservados, por lo que pueden convertirse en perros peleones y agresivos si no se los educa correctamente. Estas características poco deseables en un perro mascota pueden ser muy bien canalizadas para convertir al riesenschnauzer en uno de los mejores perros de guardia y defensa.
Por otra parte, cuando son correctamente socializados desde cachorros, estos perros pueden llevarse bien con otros de su especie, con las personas y con mascotas de otras especies. Sin embargo, no es de esperar que sean tan sociables como un golden retriever u otro perro similar. Cuando viven en el ambiente adecuado y son educados y socializados correctamente, los schnauzer gigantes pueden convertirse en mascotas excepcionales. Su temperamento les permite ser grandes compañeros de personas dinámicas que disfrutan de actividades físicas, así como de familias con niños grandes, adolescentes y jóvenes. No suelen ser las mejores mascotas para familias con niños pequeños, ya que estos perros disfrutan mucho de juegos rudos y pueden llegar a ser muy torpes con los niños.
Cuidados del schnauzer gigante
El pelaje de estos perros no es difícil de mantener, pero demanda ciertos cuidados. Es necesario cepillarlo unas dos a tres veces por semana para evitar que se enrede. Además, es importante limpiar la barba después de las comidas, para retirar restos de comida que pueden generar malos olores. Y también es bueno llevar a los perros al peluquero canino unas tres veces al año. De todos modos, el pequeño esfuerzo que demanda cuidar el pelo de este schnauzer vale la pena, ya que el riesenschnauzer pierde muy poco pelo y no tiene un olor tan fuerte como otros perros. Puesto que es normal llevar al schnauzer gigante a la peluquería canina, es importante acostumbrarlo a usar transportines para perros. De esta manera se sentirá cómodo y seguro cuando tenga que esperar encerrado en un transportín.
En lo que respecta al ejercicio, este perro necesita mucho. Para mantenerlo feliz es necesario sacarlo a pasear unas tres veces al día y permitirle hacer una buena cantidad de ejercicio. También necesita juegos y, de ser posible, con otros perros. Por supuesto, solamente debe jugar con perros con los que se lleve bien. Los deportes caninos como el freestyle canino y el agility le vienen muy bien a esta raza, ya que le permiten liberar energías de manera controlada. Sin embargo, los deportes de perros de protección, como el schutzhund, suelen ser mejores ya que le permiten al schnauzer gigante cubrir sus necesidades de juego rudo y desarrollar su potencial como perro de defensa (incluso si solamente es una adorable mascota).
Al igual que el schnauzer y el schnauzer miniatura, el gigante es un perro independiente. Sin embargo, no merece ni debe estar solo por períodos muy prolongados. A pesar de su independencia, necesita compañía frecuente. Este perro no es apto para vivir en pisos, ya que por su tamaño y dinamismo tiende a causar problemas. Sin embargo, puede llegar a adaptarse a la vida en un piso si recibe muchos paseos y está muy bien educado. De cualquier manera, lo mejor es que viva en una casa con jardín y pase tiempo tanto en el exterior como en el interior.
Educación del schnauzer gigante
El schnauzer gigante responde bien a diferentes estilos de adiestramiento canino, pero puede pasar por testarudo cuando se lo trata con castigos excesivos. En esos casos se rebela o se inhibe por completo. Por tanto, lo mejor es entrenarlo mediante adiestramiento en positivo, con técnicas como el adiestramiento con clicker.
Por su tamaño y dinamismo, estos perros pueden desarrollar comportamientos problemáticos. Pueden llegar a ser destructores si se quedan solos por mucho tiempo o si no reciben el ejercicio suficiente. También pueden presentar problemas de agresividad cuando no han sido socializados correctamente.
Salud del schnauzer gigante
Al igual que muchas razas de perros actuales, el schnauzer gigante tiene predisposición a ciertas enfermedades caninas. Entre los problemas de salud más frecuentes en esta raza se encuentran el cáncer, la torsión gástrica, la epilepsia y la displasia de cadera. También pueden lastimarse las articulaciones por los saltos y juegos brutos cuando son cachorros, por lo que es bueno evitar juegos muy brutos y saltos altos cuando los perros todavía no están completamente desarrollados.